La retención de líquidos es un problema común que aparece en muchas ocasiones por una dieta inadecuada o cambios en los hábitos alimenticios que acostumbramos a hacer en verano.
La retención de líquido es además una de las responsables de que en ocasiones nos sintamos hinchados o de que no consigamos perder el peso que deseamos durante una dieta, pero la realidad es que no siempre resulta fácil de detectar.
¿Cómo saber si estás reteniendo líquidos?
1. Presta atención a tus piernas. Las extremidades suelen ser las primeras afectadas, se comienza a experimentar cansancio y pesadez en las piernas debido a la falta de un drenaje adecuado. Cuando retenemos líquido tanto los pies como los tobillos están más hinchados de lo normal.
Las piernas también pueden presentarse hinchadas, aunque para la mayor parte de las personas que padecen de retención de líquidos no es algo tan fácil de percibir. Los calambres y la debilidad en esta zona son también síntomas frecuentes.
2. La zona del vientre es una de las más afectadas. Se hincha haciendo que nos sintamos más "gordos" de lo que realmente somos, a medida que trascurre el día la hinchazón aumenta.
Es posible prevenir la retención de líquidos de forma efectiva, pero para ello conviene realizar algunos cambios importantes. Además si el problema se agrava será necesario consultar a un médico para descartar problemas renales, hepáticos, cardíacos u otras enfermedades.
Si deseas evitar que tu cuerpo retenga líquido es conveniente tomar en cuenta estos consejos:
- Evita comer con mucha cantidad de sal.
- Incorpora una dieta a tus hábitos.
- Haz ejercicio, ayuda a controlar la retención.
- Intenta evitar el estrés.
- Si pasas muchas horas sentada, intenta estirar las piernas cada hora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario